Una persona sana puede comer prácticamente de todo; la clave está en las combinaciones y cantidades: en eso consiste la buena nutrición.
Cada año mueren en el mundo 2.8 millones de personas debido al sobrepeso o la obesidad, y México ocupa el segundo lugar en prevalencia de esta última. “Tener una mala alimentación deriva en problemas crónicos y degenerativos que pueden modificar por completo la esperanza y calidad de vida”, explica Noemí Leyva, directora académica de la Licenciatura en Nutrición en la Universidad Intercontinental (UIC).
Si bien existen muchos mitos acerca de lo que es saludable o no y hay gran cantidad de personas improvisadas que ofrecen su opinión o dan recomendaciones al respecto, el único capacitado es el licenciado en Nutrición, por lo que es importante siempre acudir a un profesional, quien será la única persona con los conocimientos precisos tanto de los alimentos como de los procesos fisiológicos del organismo.
“Una persona sana puede comer prácticamente de todo; la clave está en las combinaciones y cantidades. No hay alimentos malos, sino alimentos que no debes consumir de forma habitual; mientras que hay otros más sanos que sí es recomendable incluir diario. Cuando las personas no tienen acceso a un comedor institucional, por ejemplo, pueden preparar una ensalada o colación con todos los grupos de alimentos para hacer esta comida cuando se encuentra en la oficina y luego llegar a casa en la noche y hacer una comida más en forma. Siempre hay manera de preparar una comida balanceada, con todos los grupos de alimentos”, aclara Leyva.