El akabeko es un colorido juguete japonés, inspirado en una vaca. Suele ser de madera o de papel maché y gusta tanto a nativos de Japón como a turistas extranjeros. Aquí traemos la historia de este peculiar y simpático juguete.
Lugar de origen
El akabeko es tradicional de la región de Aizu Yanaizu, en Fukushima, Japón. Esta zona tiene una arraigada historia tanto samurái como bélica. Aún conserva muchos elementos del Japón antiguo, lo que hace de ella un lugar atractivo. Posee, además, su propio dialecto, del cual surgió el nombre akabeko. Su primer término, beko, significa “vaca”. De hecho, la traducción de la palabra akabeko es “vaca roja”.
La historia de la vaca
No se sabe con certeza la historia que dio origen a la creación de este juguete. Sin embargo, en torno de él circulan dos leyendas que hoy te compartimos.
Construcción de un templo
En el siglo XVII, hubo un terremoto en Aizu Yanaizu que destruyó muchas casas y templos. Años después, se emprendió la reconstrucción de uno de los principales templos budistas, ubicado en la cima de una colina.
Transportar los materiales hasta el lugar era una tarea muy difícil para los habitantes. Se cuenta que, de la nada, apareció una manada de animales de rojo pelaje. Unos dicen que eran toros, otros que eran vacas. Lo cierto es que, gracias a ellos, la construcción pudo concluirse. Después de ello, los animales desaparecieron.
Una variante de esta historia relata que fue sólo una vaca la que se usó para construir el templo. Al terminar, entregó su alma a Buda y se convirtió en piedra.
Protectora de niños
Cuentan que, en el período Sengoku, hubo un brote de viruela en Japón. Los habitantes de Aizu Yanaizu notaron que los niños que tenían un akabeko no se enfermaban. Como observarás, el cuerpo del akabeko muestra ciertos rasgos circulares que podrían representar las marcas de la enfermedad.
Por lo anterior, se considera a este juguete japonés como protector contra la viruela, en especial, protectora de niños.
Símbolo de fuerza y persistencia
Cualquiera que sea su origen real, el akabeko representa la fuerza y la salud. Además, el repetitivo movimiento de su cabecita resulta divertido e incluso transmite un poco de paz.
Para saber más:
Estudia japonés en Dirección Académica de Lenguas Extranjeras y Multiculturalidad, Universidad Intercontinental. Disponible en https://www.uic.mx/lenguas-extranjeras/
Conoce la Historia de la UIC, Universidad Intercontinental. Disponible en https://www.uic.mx/nosotros/historia/
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