Crear imágenes secuenciadas en viñetas con una narrativa que contenga una historia determinada es pisar el umbral del arte gráfico. Es, sobre todo, transitar en el mundo de la comunicación efectiva, sea cual sea la intención del mensaje en cuestión. Así, se puede abordar el mundo del cómic al que, en buen castellano, podemos nombrar historieta.
Astérix el Galo
Un ejemplo contundente de trasmisión de cultura, con buenas dosis de entretenimiento, mordacidad e ironía, es Astérix el Galo. Esta edición, de origen francés, es obra cumbre del guionista René Goscinny y el dibujante Albert Uderzo.
Su origen es remoto (1959) y su cuna fue el famoso barrio bravo de Saint-Denis, ubicado al norte de París. Es, quizá, la historieta más famosa del mundo; se ha traducido a multitud de idiomas, incluyendo latín y griego antiguo. Su emisión consta de 37 álbumes cuya aparición va de 1961 hasta 1996, con sus consecuentes reediciones hasta 2009, aproximadamente.
Clave de su éxito
Elementos claves del éxito de la serie son el hecho de que contiene elementos cómicos para lectores de distintas edades. Para, los niños, peleas y otros gags visuales; para los adultos, referencias a la cultura clásica, los personajes contemporáneos, los juegos de palabras. Además, hay datos históricos de relevancia capital que ilustran con claridad y amenidad el devenir histórico de la humanidad.
Su aporte cultural
La obra combina dibujo y contenido, y recorre los orígenes de los países europeos en 50 a. C., justo cuando empieza a surgir el poderío del Imperio Romano. Galos (franceses), bretones (ingleses), iberos (españoles), godos y visigodos (alemanes); así como celtas, númidas y egipcios, son integrantes de países y culturas imprescindibles de abordar para explicar la conformación del mundo antiguo que dio pie, años después, a la Edad Media, la Edad Moderna y la Edad Contemporánea.
Sin titubeos, Astérix el Galo es una de las mejores herramientas con las que cuenta el ser humano para describir la Historia y entender cómo y por qué somos lo que somos hoy por hoy… por supuesto, con humor y un “piquete” de inventiva.
Los cómics, testimonio vital
Los cómics son, inevitablemente, uno de los mejores vehículos para dejar testimonio de nuestro paso por el planeta Tierra: en México sobran ejemplos de altísima calidad (Los Agachados, La Familia Burrón, Kalimán, Memín Pinguín, entre otros); y en Estados Unidos, nada menos que los súper héroes de Marvel (Supermán, Bátman, La Mujer Maravilla, Flash y similares) para reafirmar lo que aquí se ha descrito.
Creatividad sin límites
La imaginación es infinita y el talento está donde se busca; los creativos y los editores que les dan espacio también.
El medio es el mensaje, ya lo dijo McLuhan. Y para ello están los cómics de calidad y proyección comunicativa.
No dejes de echarle un vistazo a Astérix… ¡Te encantará!
Para saber más:
Licenciatura en Comunicación Digital, Universidad Intercontinental. Disponible en https://www.uic.mx/licenciaturas/division-ciencias-sociales/comunicacion/
Licenciatura en Diseño Gráfico, Universidad Intercontinental. Disponible en https://www.uic.mx/licenciaturas/division-ciencias-sociales/diseno-grafico/
Maestría en Guionismo, Universidad Intercontinental. Disponible en https://www.uic.mx/posgrados/posgrados-uic-en-arte-comunicacion-y-tecnologia-en-contexto/maestria-en-guionismo/