El 26 de febrero tuve la oportunidad de guiar un recorrido por la Colonia San Rafael en la Alcaldía Cuauhtémoc. Esto se llevó a cabo como parte de la organización Camina, Centro de estudios en movilidad peatonal, de la cual formo parte. El evento se realizó con la organización y apoyo de la Asociación Civil FUNDARQ y Sherwin Williams. A diferencia de otros recorridos, el objetivo de éste fue observar lo que ocurre en las calles del barrio a escala peatonal.
Colonia San Rafael, un punto de partida
La Colonia San Rafael se encuentra claramente delimitada por vías primarias y representativas de la ciudad. Al norte, la Av. Ribera de San Cosme, al sur, Sullivan, al oeste, el Circuito interior y la Av. Insurgentes. Está compuesta por manzanas cuadradas de dimensiones regulares y por espacios públicos, equipamientos y sitios de interés como universidades y teatros con visitantes diariamente.
Nuestro recorrido comenzó en el Monumento a la Madre. Durante nuestro trayecto a pie, nos detuvimos en 8 puntos para observar detalladamente los alrededores de sitios como el Teatro Aldama, el mercado de San Cosme, el Teatro México, el Jardín del Arte, escuelas, y demás.
Ambientes seguros y con perspectiva de género
El ejercicio de observación plasmado en una auditoría evalúa el entorno con base en los 6 principios o líneas estratégicas para construir ambientes seguros con perspectiva de género planteados por el grupo de urbanista catalanas Col-lectiu Punt6 (2019).[1] Dichas estrategias apelan a que las construcciones sean visibles, vigiladas, señaladas, equipadas, vitales y comunitarias.
No debemos olvidar que en el urbanismo la perspectiva de género implica reconocer que las personas habitamos y percibimos la ciudad de manera diferente de acuerdo con diferentes características, por ejemplo, el género. Por lo tanto, se plantea una visión inclusiva, donde con base en los principios explicados anteriormente se seleccionaron 20 indicadores.
Algunos de esos elementos son: ancho de banquetas, existencia de obstáculos, elementos de accesibilidad universal, presencia de niños, espacios para adultos mayores y personas con discapacidad, señalética y demás. A partir de la observación, se le asignó un valor de 0 a 2 de acuerdo con la presencia y calidad de cada uno de ellos.
Colonia San Rafael, un lugar con potencial
Finalmente, detectamos que en la Colonia San Rafael circulan de manera peatonal y usan los espacios públicos personas de diversos géneros y edades. En ningún momento del recorrido se observó la presencia de alguna persona con discapacidad o limitación física vinculada con la movilidad, lo cual nos indica la posible falta de criterios de accesibilidad universal. En general el barrio es dinámico, con servicios y actividades en planta baja. Los principales problemas detectados fueron la existencia de obstáculos para caminar, obstáculos visuales y falta de mantenimiento de señalética, sobre todo en las intersecciones y cruces. La calificación promedio fue de 20 a 40 puntos máximos.
Si bien el recorrido tuvo una enfoque más informativo y educativo que de investigación, resulta importante, sobre todo para los arquitectos y diseñadores urbanos, enfatizar en qué es lo que hace para que las calles sean más caminables, cómo podemos aportar desde el diseño a mejorar la percepción del espacio y a detectar zonas para mejorar la experiencia de habitar nuestras ciudades para todas las personas.
Para saber más
Si quieres saber más al respecto, conoce las nuevas tendencias en materia de arquitectura, las cuales apelan a la inclusión y perspectiva de género y, en consecuencia, traerán magníficos resultados.
Licenciatura en Arquitectura, Universidad Intercontinental.
[1] http://www.punt6.org/wp-content/uploads/2016/08/Entornos_habitables_CAST_FINAL.pdf