El 19 de marzo del año en curso, en el Auditorio Francisco Xavier, el reconocido periodista de TV Azteca Miguel Aquino presentó ante los estudiantes de la Licenciatura en Relaciones Comerciales Internacionales la conferencia denominada “Corrupción de los agentes aduanales”, durante la cual compartió algunas de sus experiencias al efectuar investigaciones periodísticas relacionadas con el crimen organizado.
Así, quien obtuviera el premio Quality Global Gold por su labor como jefe de la sección de seguridad de Azteca Noticias, comenzó por asegurar a los asistentes que el narcotráfico no es lo que se ve en las “narcoseries”, “el narcotráfico, lamentablemente ―dijo― es una realidad más dura, más cruda […]; es un cáncer que está acabando y afectando a nuestros jóvenes. En México, el consumo de droga de 2001 para acá se ha incrementado en 40 por ciento”.
La ruta del narcotráfico en México pasa como “los plátanos o las papayas: en camiones, en cajas, en contenedores, por mar, aire o tierra”. “México es uno de los países recargados; […] desde hace más de diez años estamos peor que Colombia en la época de Pablo Escobar; ya rebasamos a los colombianos”, aseguró.
Por otra parte, el autor de ¿De qué se ríe la Barbie? expresó que para poder pasar toda la droga y llegar a diferentes puntos, los narcotraficantes “necesitan corrupción, nexos con la policía, con la gente de migración. La dependencia más corrupta en este país es migración y las aduanas”, informó. “Se ha descubierto que desde Baja California hasta Tamaulipas hay una red conectada con la gente de aduanas que están bajo investigación por diversas cuestiones. Policía, migración y aduanas son los principales socios de los narcotraficantes; sino ¿cómo pasarían un tráiler con un contenedor?”, cuestionó y agregó: “La mayor cantidad de droga se mueve a través de los puertos, a través de los contenedores y todo eso pasa en algún momento por las aduanas”.
Por último, el periodista expresó que “está fallando el debido proceso en México; mientras no se castigue a los delincuentes, no habrá una disminución del delito. Es importante perseguirlos, detenerlos y hacerles un proceso correcto para que paguen. Si no pagan, no se inhiben, continúan delinquiendo […] Este gobierno no ha tenido ningún resultado; por ejemplo, no ha habido un solo detenido por el huachicoleo”, concluyó.