Primeramente, la doctora Langarica expresó que la pandemia “ha tocado la fibra más profunda del orden social contemporáneo”, por lo que es “necesaria una conversión en sentido humano, social y ecológico […] Es necesario dar un salto audaz en la forma en que la humanidad desarrolla su ser en el mundo […] La labor de la filosofía es hacer un nuevo discernimiento y buscar un espacio de esperanza”, apuntó, en tanto que el doctor Casales señaló que “el estado de crisis nos lleva a reflexionar en lo que es realmente valioso”.
Por su parte, el maestro Ortiz se planteó la pregunta “¿Qué es la nueva normalidad?” y respondió que “esto a lo que hemos llegado no es una norma, sino una primera solución” y se refirió a encontrar un punto de equilibrio entre conservar la salud de la población y no entrar en una crisis económica grave.
Finalmente, el doctor Sánchez habló de lo que podría significar esta nueva normalidad desde cuatro aspectos: 1. Habitualidades, 2. Dicotomía anormalidad/normalidad, 3. Afectividad y 4. Virtudes, acerca de lo cual aseguró que en estos tiempos es necesaria la virtud de la fortaleza “para hacer frente a esta situación porque con ella descubrimos esa fuerza vital que nos permite estar en el mundo”.