La conferencia dio inicio a las 10:00 am (hora de Colombia) y desde el principio se notó el interés de cada uno de los participantes. Los invitados a exponer fueron profesionales, originarios de diversas partes del mundo y expertos en diversas ramas del conocimiento, como filosofía, medicina, derecho, educación, sociología, con mucha experiencia en el tema.
Las exposiciones de los panelistas se dividieron en cuatro apartados: en el primero, se dieron las definiciones de los temas en cuestión; el segundo se abordó desde la medicina y la farmacéutica, el tercero desde la bioética y el cuarto desde la filosofía.
Se comenzó por definir conceptos y se dijo que lo que se busca es la muerte de la persona y que existe un problema con el lenguaje al ser manipulado por aquellos que tienen mayor influencia o poder. Sin embargo, los expertos en el tema invitan a hablar con claridad en estos temas y llamar a las cosas por su nombre. Sobre todo, se trató lo relacionado a lo que comúnmente se le ha llamado “muerte con dignidad”, siendo éste un argumento a favor de la eutanasia o el suicidio asistido. Pero se aclaró que la dignidad es una característica innata al ser humano, no es algo se pueda quitar o poner a capricho, por lo tanto, si se muere con dolor o sin él, la muerte puede ser digna.
Además, el derecho a la vida es inviolable; es decir, no se puede atentar contra ella y la eutanasia es una opción que viola este derecho.
Sin embargo, es triste cómo algunos gobiernos prefieren lo fácil, lo rápido, lo barato y apuestan por una inyección letal, un medicamento fulminante, pues prefieren gastar en algo que dé solución rápida e inmediata que invertir en lo que implica los cuidados paliativos. Incluso, existen casos de gobiernos que al aprobarse la eutanasia ante la ley disminuyeron de manera considerable el apoyo a la población en cuestiones médicas.
Además, desde la medicina, se afirma que la esencia de esta ciencia busca el cuidado y la mejora de la salud, por lo cual, la eutanasia es contraria a su fin ya que el objetivo es totalmente distinto.
Finalmente, se podría decir que la mejor propuesta que se hizo es buscar en todo la excelencia, ya que, como lo afirmaba uno de los panelistas: “existen puestos en la sociedad que no se nos otorgan no porque no nos los quieran dar, sino porque nuestras propuestas son pobres o incompletas, por ello formulemos propuestas con mayor concreción. Y con esto, seguramente esos puestos, desde los cuales se puede defender mejor la vida, se nos darán”.
Por lo tanto, urge apostar por la excelencia. Urge seguir defendiendo la vida, la muerte nunca ha sido una opción mejor para el progreso de la civilización.
Redacción: Nabor Reyes Irineo, escolapio.