Como ya es tradición, la Escuela de Arquitectura de la UIC, efectuó, el jueves 24 y el lunes 28 de octubre, una actividad llamada “Repentina”, que consiste en el desarrollo de un proyecto arquitectónico a lo largo de un día en el cual se invierten alrededor de 8 horas continuas de arduo trabajo. El evento inicia por desvelar el tema a desarrollar y la integración de los equipos: se crearon 15 de grupos de 5 alumnos cada uno, incluyendo alumnos de primero a noveno semestre, por lo que se tuvo una participación de 97 por ciento.
La repentina se dividió en dos partes: la primera fue la entrega del proyecto el jueves 24 y la segunda el lunes 28 lo cual incluyó una maqueta estructural del proyecto en madera Esc 1:10 y una lámina del proyecto.
En esta ocasión, el proyecto se llamó “Conexiones” y consistió en crear un habitáculo en un árbol (treehouse), el cual debía diseñarse de manera cohesiva y sustentable en un lenguaje arquitectónico contemporáneo, enfatizando el puente que uniría a los dos árboles. Todos los detalles constructivos tenían que reflejar el uso particular de la madera. El predio se ubicó en el campus a un lado de la cancha de soccer.