El lenguaje, un código
El lenguaje estructura el pensamiento. La idea, el sentimiento, el deseo, el gusto y el disgusto son transmitidos por un código formado por signos y símbolos establecidos y utilizados en común por un grupo de seres vivos.
¿Qué transmite el lenguaje?
Los seres humanos usamos la palabra (ese código en común) para dar a conocer quién y cómo soy. Qué y cómo lo vivo, en qué o en quién creo, de dónde soy, a qué grupo pertenezco, qué es importante para mí y qué siento. Así, intentamos romper las barreras que físicamente nos separan el uno del otro (la materia, la cultura, nuestro origen). Establecemos un puente para sentar coincidencias -un piso común- que nos una en el mejor de los casos -o nos separe, pasando a formar parte de los ‘desconectados’.
Los idiomas
Aprender un código diferente al propio -un idioma- no sólo nos permite acceder a un vocabulario específico, sino que nos abre la puerta hacia otros mundos, otras culturas (maneras de ser y de comportarse), enriqueciendo con ello nuestro conocimiento de este vasto planeta en el que todos habitamos.
El inglés, un puente indestructible
Actualmente, el inglés sigue siendo el puente que une a los hablantes sin importar su origen o sus creencias. El mismo, fue utilizado por primera vez en la Inglaterra Anglosajona de la época medieval y es hablado por más de 400 millones de hablantes nativos. Lo que significa que es el idioma más hablado después del chino mandarín y del español. De ahí que, se llegó a decir que el Imperio Británico se extendía a lo largo de los cinco continentes. Su influencia continúa hasta nuestros días y su conocimiento es indispensable en ámbitos como la tecnología, las finanzas, los negocios, la ciencia, el arte, el turismo y la cultura en general.
Para saber más:
Idiomas, Universidad Intercontinental.
